viernes, 11 de enero de 2008

Días Amarillos


Llueve, y por la ventana del balcón entra una luz amarilla intensa que riega todo el salón. Los días en que la luz blanca de a diario coge sus vacaciones sin avisar son tremendamente extraños. A mí particularmente no me deja concentrarme. Ando con la cabeza de aquí para allá, girando fugazmente la mirada hacia la luz, como preguntando al vacío qué es lo que estaba pensando. Haciéndole guiños a la locura. Así paso los días amarillos.

Creo que un día como hoy es el más indicado para escribir algo, ya que semejante estado mental podría parecerse al "flujo de conciencia" de las novelas de Virginia Woolf. Aprovechar el pensamiento que cruce por mi cabeza y plasmarlo. Aunque pensándolo bien será mejor ajustar un poco el grifo, no sea que una locura inconfesable quede aquí para la posteridad. Por otra parte, como nada es eterno, las futuras generaciones me recordarán simplemente como quieran recordarme. Pero, ¿no es demasiado pretencioso pensar que seré recordado? Sí, por supuesto que sí. No me avergüenzo porque es la chispa de locura que habita en todos nosotros la que mueve mis pensamientos y mis dedos los días amarillos.

¿Y por qué conformarse con pensar como un loco? Cruzar el charco que separa la cordura de las fronteras de lo insano sería mucho más honroso. Dando ejemplo, como un buen mesías del siglo XXI. Salir a la calle sin freno de mano, arrasando con todos los carritos del mercado y los carteles de las rebajas, predicando la buena nueva con una sintaxis inventada para la ocasión, insultando a los banqueros y correligionarios. Y luego, a saltar a la comba con un cable de alta tensión. Pero todo esto no lo voy a hacer, porque lo más me apetece es quedarme en casa al refugio de la lluvia que siempre baña los días amarillos.

Con las hadas madrinas perdidas en combate y los ángeles de la guarda de compras, no me queda más remedio que encomendarme al silencio de mis cuatro paredes, testigos inmutables de mi paso por el mundo en estos días. Quizás algún día pueda mirar atrás por encima del hombro y despedirme de ellas con un gesto hortera estilo de los ochenta. Mientras, pasan los días como moscas. En círculos. Ahora ya no sé ni cómo ni cuándo me espera el destino a la vuelta de la esquina. Atrapado como el animal que nunca he dejado de ser, esperando encontrar la tierra prometida. Y mientras escribo estas lineas me doy cuenta que la noche ha terminado por desteñir el color de mi día, ha vuelto todo a la normalidad. Me pregunto, ¿cuándo he vuelto?

24 comentarios:

Miss Missing dijo...

No ajustes tu grifo, permítelo correr...

Pues últimamente cuando hay estos días me apetece correr sin razón aparente bajo la lluvia por las calles, empaparme de ella, escuchar solo el latido de mi corazón y notar que me falta el aliento. ¿Puede ser locura también?

Mandarina azul dijo...

Cuánta inspiración desde el silencio de tus cuatro paredes, Amigo Secreto. Y... puedo creerme que la lluvia de luz amarilla ha colaborado, pero ante todo creo que tu "chispa de locura" fluye la envuelva el color de luz que la envuelva.

¡Qué gusto leerte!

Un beso. :)

Desde mi Atalaya dijo...

Amigo secreto, que bonito escribes y cuanto dices, me ha gustado mucho, y deja correr tus sentires y tu imaginacion, que sera lo mejor.

Un abrazo,

Soraya

Belén dijo...

Querido amigo... que gusto leerte de nuevo!!!!!!!!!

Bienvenido otra vez :)

Besos!

Juan Tamenela dijo...

No deje de visitar la Semana Amarilla del Recorte Inglés, unas rebajas que no te debes perder.

Lucía dijo...

Me gusta especialmente sentarme a leer durante los días amarillos, aunque no me concentro bien, dejó que la vista se pierda en la luz y los pensamientos se me diluyen.

Madame Vaudeville (Chus Álvarez) dijo...

Acabo de conocerle en el reino azul de mandarina. Me enamoré de su nombre y de la imagen de su perfil. He pasado sin avisar y me he quedado también prendada de sus letras. Un placer. Prometo volver.

Isabel Burriel dijo...

Qué bueno, amigo. Hace tiempo hice una especie de grupo literario. Nos contaron lo que era el "flujo de conciencia" como técnica de escritura y a ti te ha salido bordado con este día amarillo.

Besos

Nosotras mismas dijo...

Me ha gustado mucho tu post.

saludos.

Anónimo dijo...

Hay veces que es mejor marchar y no regresar, aunque tu regreso sea rato y me alegre ;)

Un abrazo y feliz dormir8 a 14 de enero.

La_EsPeCtAdOrA dijo...

cobijarte en tus cuatro paredes no es mala idea.. besos

Kt. dijo...

La lluvia la disfruto de dos manera: comtemplándola desde la ventana o sintiéndola en la piel :)

Besos!

karen (renglones insomnes) dijo...

Me fascina dejarme llevar por "esos días amarillos" por esa corriente a lo Virginia Woolf.....ver el cartel de "Solo para locos" del "Lobo Estepario" de Hesse y entrar.....y como Harry, perderme y jugar y no dejar de reacomodar las piezas en el tablero....

Me fascina abrir más el grifo y sentirme en "casa" en ese "locura"......pero, qué es la "locura"......quién dice que es mala????

Nos leemos amigo.....

(por qué hay sitios dónde no me dan la opción de firmar mis comentarios con mi alias y dirección??? siempre me lo he preguntado)

http://insomniamakesmeparanoid.wordpress.com

Mandarina azul dijo...

Amigo secreto, celebrando tu regreso he dejado algo para ti en:

http://ventanadiscretamandazul.blogspot.com/

¿Te asomas? :)

Eso sí, como se te ocurra irte de nuevo sin avisar, ¡te quedarás sin tu ventana! :P

Mustafa Şenalp dijo...

very nice a blog :)

Mandarina azul dijo...

¡Tres días!

El amigo secreto dijo...

Si, es lo que tiene el tiempo. Pasa inexorable de la forma más implacable y eficiente posible. Gracias Mandarina. Solo tres días...

PIZARR dijo...

Me acaba de ocurrir como a Madame, tenía que ser la genial Mandarina el vehiculo para descubrirte.

Además compartimos la nueva casita de Manda, si te asomas a tu ventana, seguro que me ves... allí al fondo, asomada en una estilizada ventana azul, llena de flores.

Me alegra haber llegado precisamente en este momento de metamorfosis final de tu retiro.

Intuyo que ese retiro será muy fructífero en tus letras futuras.

Encantada de descubrirte y de leerte.

Un saludo desde el Mundo de los Sueños.

Mandarina azul dijo...

Dos... :)

PIZARR dijo...

Pues aunque no se lo que va a ocurrir hoy... me adelanto a nuestra amiga Manda y te digo...

Uno... jajajaja

Un placer haberte visto por mi blog.

En cuanto a lo de " vida intensa" he de decirte, que a raiz de empezar a escribir sobre ella, es cuando empecé a darme cuenta de que debe de ser así. Al parecer las vidas de las personas suelen ser más... digamos normales e incluso grises diría yo.

De todas formas ya me gustaría saber en que post has encontrado más intensidad de vida...jaja

UN SALUDO

Mandarina azul dijo...

Sí, ¡uno!

:)

Miss Missing dijo...

¿Vas a volver a desaparecer?

Mandarina azul dijo...

Toda la suerte del mundo para ti, amigo secreto. Y, por favor, no vuelvas a desaparecer.
:)

Le Mosquito dijo...

Salir a la calle sin freno de mano, arrasando con todos los carritos del mercado y los carteles de las rebajas, predicando la buena nueva con una sintaxis inventada para la ocasión, insultando a los banqueros y correligionarios

Sí.
:)
Qué bueno ser ¿malo?, de cuando en cuando.
Sí.