domingo, 13 de mayo de 2007

De noche


LLueve, incluso diría que lo hace con fuerza y se acompaña de viento. He luchado para ganar una batalla a mi pereza patológica y al fín consigo arrancarme unas palabras de los dedos. Estoy en un momento de estado catatónico. Afuera llueve, y sin embargo casi no se escucha por el ruido de la gente al salir del pub. Hasta una racha de viento golpea mis ventanas. ¿Y si alguien lee esto? ¿Se preguntarán por el significado? La realidad es que hoy no hay significado. Es parte de mi guerra particular contra la desidia. A pesar de ello, mi preocupación por encontrar un significado, un motivo, un fín, hará que, en mi cabeza, todo encaje a la perfección aunque sólo sea para reconciliarme conmigo.

¿Cómo pasar por encima de mí mismo y mi mediocridad?

Otro día más sin solución. Esperando algo que no llega pero que ya tengo. Lo tengo todo. Soy otra víctima más de estas sociedades nuevas, que descolocadas por su extrema comodidad, necesita crearse problemas que llenen su espacio vital. El sofá atrofia nuestros sentidos, los medios los entumecen y el desahogo de toda complicación nos seca por dentro.

Tal vez una respuesta sencilla sería que la completa felicidad no existe. Es extraño, o al menos me lo parece, que siendo extremadamente conformistas no seamos capaces de aceptar esa obviedad. No se puede asumir que la felicidad sea como una ecuación que tiende a infinito. Ahora mismo me encuentro yo en esa fase de tender a la felicidad. Todo esta llano en mi camino, sin dificultades ni preocupaciones, sintiéndome querido y aceptado. Lo que no se es como he llegado hasta aquí tan fácilmente en todos los aspectos. Puede que haya sido casualidad, con lo cual me consideraría extraordinariamente afortunado pese a no tener ningún mérito, o en cambio, mi destino está ya escrito, sintiendo así que mis actos tampoco tienen ningún valor verdadero y que sólo puedo participar del teatro de la vida más como espectador que como actor. Sea como fuere, lo cierto es que acaba de sonar mi querida campana berenguela dando la hora de irse a la cama porque así estaba previsto.

El tiempo responde al destino o es el destino mismo. Y el destino me dice que es la hora de ir a dormir.

7 comentarios:

Juan Tamenela dijo...

Estas cosas suelen pasar tras haberse tragado uno el concurso de Eurovisión al completo, tertulia incluida.

Saludos de un insomne

http://webblogdospuntocero.blogspot.com dijo...

me gusto tu post, gracias por pasar por mi blog pasa cuando quieras

Mandarina azul dijo...

¿Y has dormido y descansado bien? Cuando se "sueltan" cosas como las que acabas de "soltar" normalmente uno se queda en la gloria...
Yo hace ya días que intento alejar de mí la idea de que todo tiene un significado, al menos un significado común.
Y me parece muy bien que batalles contra la desidia.

Un beso :)

Miss Missing dijo...

Acerca de la felicidad, lo comentaba hace poco con un amigo ¿es algo absoluto, todo o nada, se tiene o no se tiene? O en cambio ¿hay grados a los cuales nos hemos acostumbrado tanto que no sabemos distinguir la felicidad entre tanta sensación de conformismo y compra compulsiva?

De corazón espero que exita porque sino... ¡Cuánto tiempo de espera nos queda hasta que no estemos aquí sólo sufriendo! Pienso que en algún sitio tiene que estar, lo que pasa es que está muy bien escondida.

Gracias por pasearte por mi blog. Un beso :)

Kt. dijo...

Cuando la desperdicias, la felicidad no pierde tiempo y se va a otras moradas buscando dueño... Y así se está... Cómo ya lo he dicho antes: ¿Quien que se haya dejado encontrar por la felicidad ha logrado retenerla para siempre?...
MUY BUENO TU POST...
Saludos desde Venezuela.

Gwynette dijo...

Pues si, le has ganado la batalla a la pereza y el resultado es que te hemos leido. Hay siglos en los que nada tiene sentido..pero sin saber muy bien por qué un día te encuentras con un estado óptimo y con deseos de regalar..ese es el misterio de estar vivos ..:-)

Saludos de alcachofa

Insumisa dijo...

"La comodidad llega como invitada a casa, se queda como anfitriona y termina por esclavizarnos."

Solo muévete... deja de pensar en ti dos minutos, presta atención, se gentil y regala mas de lo que tienes para dar.